Zapatillas de Seguridad
Las zapatillas de seguridad son solo una parte del gran mundo del calzado de seguridad.
Tanto los pies como el resto de las partes del cuerpo de los trabajadores que desarrollan trabajos en los que puedan correr riesgos que deteriore su salud, han de estar bien protegidos con artículos que cumplan con las normativas tanto españolas como europeas de seguridad.
En el caso de las zapatillas de seguridad decir que tienen una grandísima importancia puesto que muchos de los riesgos laborales afectan directamente a los pies, bien por caída de objetos pesados, o bien porque se pueda clavar algún objeto punzante en la suela.
Tanto en un caso como en otro, las zapatillas de seguridad pueden ser quienes marquen la diferencia entre un simple suceso o un accidente laboral que perjudique la salud y la integridad física de los trabajadores.
Además de brindar seguridad y protección a los trabajadores, las zapatillas de seguridad también deben ofrecer comodidad puesto que es una prenda que han de llevar puesta durante toda la jornada laboral y es importante que les ayude a desempeñar cualquier trabajo con normalidad.
También es importante que la conservación y el mantenimiento de las zapatillas de seguridad sea el correcto para que mantenga sus cualidades.
Zapatillas de seguridad versus calzado de protección
Habitualmente oímos hablar de calzado de seguridad y también de calzado de protección. A priori, podemos pensar que son lo mismo, aunque se tenga la posibilidad de llamarlo de diferentes formas, pero, en realidad, esto no es así.
Ambos están destinados a utilizarse durante la actividad laboral, pero no sirven para lo mismo.
Si nos referimos al calzado o zapatillas de seguridad, en este caso incorporan elementos o diferentes partes que protegen a los trabajadores de riesgos y de accidentes. Este calzado cuenta con topes de seguridad, suelas antideslizamiento o punteras metálicas, entre otras cosas de seguridad para proteger los pies de los trabajadores de riesgos laborales.
Si nos referimos al calzado de protección, y aunque también protege los pies de los posibles riesgos laborales, este calzado no garantiza la protección total contra impactos. Aunque esto es así, este tipo de calzado también puede llegar a incluir algunos elementos que aseguren la máxima protección.
La diferencia más importante es que, mientras que el calzado o las zapatillas de seguridad cuentan con partes protectoras del pie en su totalidad contra los golpes, en el caso del calzado de seguridad esto no es así.
Si tuviéramos que hacer una conclusión y resumen de las zapatillas de seguridad esta sería:
✅ Se encargan de proteger el pie frente a posibles impactos durante el desarrollo de la actividad laboral o en cualquier momento siempre que se lleven puestos, claro.
✅ El modelo deberá elegirse de acuerdo a las necesidades laborales. La elección del modelo adecuado será lo que marque la diferencia entre un resultado positivo o la lesión por no estar bien cubierto el riesgo.
✅ Las zapatillas de seguridad ha de ser cómodo, flexible, también resistente al agua, la suela ha de ser antideslizante y deberá llevar puntera de protección metálica.
✅ Debe incorporar el nivel de protección necesario para cada riesgo.
La clave es tener claro el tipo de trabajo que se va a desempeñar antes de escoger un tipo de zapatillas de seguridad u otras o un diseño u otro.
Igual de importante es comprobar que los modelos que se elijan cumplan con la normativa y tengan las certificaciones necesarias, además de seguir siempre las instrucciones de uso y mantenimiento que marque el fabricante.
Sigue leyendo un poco más abajo para más información sobre las zapatillas de seguridad.
El calzado de seguridad tiene la función de proteger el pie. Para ello lo cubre por competo y cuenta con un tope o con una puntera de seguridad que protege contra los impactos los dedos de los pies.
Además de brindar seguridad, el calzado de seguridad ha de ser cómodo y flexible para proporcionar un buen movimiento y para evitar posibles enfermedades derivadas de un calzado inadecuado como puede ser dolor lumbar, dolor de pies, dolor de piernas, etc.
Deben cumplir con una serie de normas específicas y en él se debe especificar contra el tipo de riesgos de que protegen.El mantenimiento del calzado de seguridad es importante para que conserve durante más tiempo las características de protección para las que ha sido fabricado.
Es importante conocer la tipología del calzado de seguridad y las prestaciones que cada uno de ellos nos proporciona para poder hacer una elección correcta y adecuada al trabajo que desempeñamos.
- Los zapatos de seguridad podemos clasificarlos por:
- Según el material con el que están fabricados. Este, a su vez, se clasifica en dos tipologías: clasificación I y clasificación II.
- Según sus propiedades. Los requisitos de este calzado se agrupan en códigos de designación que son indicados con una S y van seguidos de una letra o un número.
- Por la resistencia al deslizamiento. Se trata de una característica muy importante e indicará la resistencia al deslizamiento en diferentes materiales.
- Calzado libre de metal. Los avances tecnológicos han permitido nuevos diseños libres de metal y mucho más confortables, por supuesto, brindando la misma seguridad o incluso más.
El uso de este calzado de seguridad está en auge y no es por casualidad.
Este calzado de seguridad S3 incorpora una película hidrorepelente en sus tejidos que permite aislar el pie de la humedad, aunque esto no debe confundirse con que sea impermeable.
La suela de este tipo de calzado lleva incorporados resaltes que proporcionan un mejor agarre en terrenos irregulares, lo que evita lesiones por resbalones.
Está indicado para trabajos realizados en zonas húmedas o donde pueda haber salpicaduras de agua. También están recomendados para su uso en la construcción, en el campo, etc.
El uso de calzado de seguridad es obligatorio cuando exista el riesgo de recibir golpes, cortes o perforaciones, también cuando se trabaje con materiales químicos o cuando exista la posibilidad de tener que coger productos pesados.
El uso del calzado de seguridad y el tipo que ha de utilizarse va a depender del sector profesional donde se desarrolla la actividad.
Cualquier zapato de seguridad deberá cumplir con la normativa de seguridad laboral correspondiente. Es importante asegurare que el calzado laboral que elegimos para el desarrollo de nuestra actividad cuenta con las características y con las exigencias que la normativa marca para ello.
Si queremos saber los riesgos de los que nos protege un calzado de seguridad es necesario conocer la norma por la que se guía, es decir, la Norma EN 20345.
Lo mencionado supone que el calzado deberá proteger contra los impactos y la compresión con una puntera de seguridad adecuada y con una suela resistente al deslizamiento.
Una vez que cumple con los requisitos mínimos mencionados, el calzado de seguridad puede incorporar más requisitos adicionales como puede ser resistencia a la perforación, cualidades antiestáticas, propiedades aislantes, resistencia a hidrocarburos, etc.
Es importante conocer los símbolos que clasifican este calzado de seguridad.
Los zapatos de seguridad han de cumplir con una serie de características y requisitos para que sean realmente de seguridad y no sean zapatos de trabajo, ya que, aunque ambos están destinados a la actividad laboral, los dos no nos ofrecen las mismas garantías de seguridad.
El calzado de seguridad cuenta con elementos que protegen a los trabajadores de riesgos y de accidentes como pueden ser los topes de seguridad, punteras metálicas o sistemas antideslizamiento entre otros.
Por otro lado, los zapatos de trabajo o el calzado de protección no garantiza la protección total contra los impactos, si bien debemos decir que protegen el pie de riesgos laborales menos importantes.
Antes de decidirse por un calzado de seguridad hay que tener clara el trabajo que tenemos que desarrollar, puesto que no todos los zapatos de seguridad protegen todas las actividades profesionales.
Los más habituales son los que se conocen con S1P que están provistos de puntera y de plantilla antiperforación. El tejido con el que está fabricado este calzado es muy transpirable y se utilizan para trabajos como puede ser la logística, almacén, transporte, obra y construcción y sector servicios en general.
El calzado S1P es el calzado de seguridad más vendido hasta el día de hoy. Es una evolución del calzado S1 que, a su vez, evolucionó a partir del SB, el cual solamente contaba con puntera.
Este calzado S1P incorpora una puntera de seguridad, la zona del talón es cerrada, es antiestático, absorbe la energía en la zona del talón que se produce tanto por pisada como por impacto y también incluye plantilla de seguridad antiperforación.
El uso de este calzado de seguridad es muy extenso y abarca desde actividades desarrolladas en fábrica, hasta actividades de construcción.
El calzado de trabajo tiene un uso intensivo, por lo tanto, es muy importante que prestemos mucha atención antes de elegirlo.
Cuando trabajamos de pie y no usamos el calzado adecuado se suele tener dolores plantares causados, normalmente, por un mal apoyo o por deformaciones del calzado tras pasar muchas horas de pie.
Otros de los problemas que se presentan cuando estamos mucho tiempo de pie es opresión e hinchazón, dolores de rodillas, de tobillo, de caderas o en el pie.
Para evitar todos estos problemas es importante tener en cuenta el diseño del calzado, la talla y el ancho para evitar que se oprima el pie, el material con el que está fabricado que favorezca la transpiración, etc.
Son varias las entidades que certifican y que participan en IQNet, como AENOR España, AFNOR en Francia, AIB en Bélgica, ANCE, etc.
IQNet es una entidad certificadora de ámbito internacional y ofrecen certificados a empresas y organizaciones para que puedan acreditar, a nivel mundial, su certificación en una norma.
Las certificaciones cuentan con nomenclaturas y cada una de ellas tiene un significado. Suelen constar de letras, números o combinaciones de ellos.
Es importante conocer la iconografía del calzado de seguridad o tener una mínima idea del significado de los símbolos para poder tomar la decisión correcta.
El tipo de trabajo que desempeñemos y los riesgos a los que nos expongamos van a determinar el tipo de calzado de seguridad que necesitamos.